Este país horripila y mete miedo de verdad

Luis Ma. Ruiz Pou  -pelandoelplatano@gmail.com

Hirripilante

Horripilar: Producir una cosa horror o un miedo muy intenso. El horror es un sentimiento intenso causado por algo espantoso. El horror también es una aversión profunda hacia alguien o hacia algo. (Dicc: de la Lengua Española). El horror implica algo paranormal, ya sean fantasmas, monstruos [sic], etc.

En cuanto al miedo o temor, es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. “Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta tanto en los animales como en el ser humano”. (Wikipedia).

La situación por la que actualmente está pasando nuestra sociedad, me recuerda un estribillo de la canción: “El Ratoncito Miguel”- La cosa está que horripila y mete miedo de verdad- y usted verá como de hambre la gente se morirá por la indiferencia del gobierno, debido a la corrupción estatal que ha estimulado actos delincuenciales a todos los niveles.

Y es que muchos funcionarios están como “El Ratoncito Miguel”. Estos roedores han vuelto al gobierno muy contento para bailar la danza de la corrupción, porque los medios de comunicación están metido en la casa durmiendo, sin reseñar la corrupción de hoy, porque silencio hay que pagar, para no se vayan a despertar; pues bailemos sin alborotar, porque también el Micifuz puede tener corazón para cantar, para reír y para gozar de la impunidad.

Es horripilante y meten miedo las cosas que están sucediendo en nuestro país; en adicción a los escándalos de corrupción administrativa ya conocidos como: contrabando, lavado de activos, drogas, sicariato, asaltos, falsificación de documentos públicos y otros.

Ahora nos encontramos con la auditoría de la Liga Municipal, la compra de vehículos sin licitación realizada por la Alcaldía de Santiago, los famosos expedientes del Juez Angomás, los furgones de Santiago con los hijos de altos dirigentes del PLD, el nombramiento como Presidente de la Junta Central Electoral de Roberto Rosario, cuestionado por una serie de cheques recibidos de instituciones del estado vía su oficina jurídica, sobre la base de contratos de asesorías, y otros más.

El más hediondo de todos, es el caso Figueroa Agosto denunciado por el investigador privado Ángel Martínez, quien le informó al comunicador Huchi Lora, que en ése expediente están involucrados 270 personas entre militares, funcionarios, empresarios, constructores, banqueros y otros. Además que copia de del mismo, reposan en manos del asesor en materia de drogas del gobierno Marino Vinicio Castillo (Vincho). Por ése caso el FBI apresó a 133 personas, entre policías, funcionarios y otros, vinculados con la red que opera desde nuestro país.

Rantón corupto

Pero lo más triste y doloroso de esta hediondez moral, es que los supuestos sectores de la luz, están como el merengue sin letras: “No dicen nada”. Dicen que el silencio es parte de la complicidad.

No sabemos si este silencio cómplice obedece a un temor o miedo por las impunidades demostradas, la prepotencias y arrogancias de algunos funcionarios que con sus actuaciones están diciendo, que en el gobierno, ellos violan todas las leyes, reglamentos y resoluciones sin que la justicia intervenga.

Por todas estas cosas es que el “país horripila y mete miedo de verdad”.