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Itinerante (adjetivo).que va de un lugar a otro sin permanecer en ninguno. (Diccionario. Libre, Internet).
“La Palabra Itinerante es un colectivo de agitación y expresión cultural. Tiene su nacimiento en Sevilla y Cádiz, y se dedica a la acción poética a través de diversas vías, lenguajes y cauces, en un continuo proceso de investigación hacia una comunicación honda y transformadora” (Revista Poética Almacén).
Todo parece indicar que el actual presidente de la nación dominicana, doctor Leonel Fernández Reyna, es un ciudadano de otro país. Un turista que pasa su vida viajando sin permanecer en algún lugar, por lo que se cree que no se conoce ni el domicilio ni el lugar de su residencia.
El presidente, que al parecer estuvo ausente del país desde el 16 de agosto del 2006 hasta hoy, porque en aquel momento, el país estaba al borde del abismo. Fue invitado por la Comisión de Ética y Combate a la Corrupción, que él mismo dispusiera como mandatario, y que dirige el doctor José Joaquín Bidó Medina, para dictar una conferencia en el Seminario: “Rol de las Comisiones de Ética en las Instituciones Públicas”.
Como itinerante, a poco tiempo de su llegada al país, le indicó a los presentes que observó que “el Estado carece de disciplina y organización, lo que le impide funcionar de manera efectiva”, por lo que dijo que “hace falta crear un sistema organizativo, uniforme, homogéneo y disciplinado para enfrentar con mayor eficacia la corrupción y otros males que afectan algunos estamentos de la administración pública”.
Más adelante planteó que “hay que dar continuidad a la ética y combate a la corrupción y propuso que, por lo menos, cada dos meses se celebren encuentros entre los distintos estamentos gubernamentales de persecución y prevención de la corrupción administrativa”.
Como se ve, Leonel deja entrever que no es el jefe de la Administración Pública y, por consiguiente, no controla el artículo 55 de la moribunda Constitución actual; por lo que la situación planteada virtualmente, no es de su incumbencia. ..¡Oh¡ ¿Ahora se declara inocente de ése desorden institucional?,
En su condición de itinerante le recomendó al colectivo allí reunido, que tienen que relanzar al sector público de este país, sobre todo lo que tiene que ver con el desarrollo humano y el personal de la administración pública"; ya que en éste gobierno, “no existe la voluntad política para combatir con determinación la corrupción y la falta de eficiencia”, todavía aún después de que él mismo y su partido morado preconizaban, desde su primer mandato, que se iba al poder “a construir un Estado moderno”, porque ellos eran “un proyecto de Nación”, en una sociedad divida en dos: “peledeistas y corruptos”.
En su peculiar forma de accionar y en completo uso de su lenguaje literario virtual, le dijo al conglomerado que observó que dentro de esta administración, existen “miles de casos que hacen negativa la percepción de la población hacia ese sector”, por lo que propuso un proceso de formación continuo y profundo que estimule al servidor público; recomendando que “las comisiones de éticas deben ser vistas como los comités de vigilancia de la democracia”.
Una de las cualidades políticas que tiene el doctor Leonel Fernández es que exterioriza, con aparente sinceridad, una supuesta preocupación por el mantenimiento de la “ética política, el combate a la corrupción y su negatividad de aceptar el clientelismo político como actividad proselitista”.
El Itinerante presidente, es quien produce su propio modelo de análisis político, organiza su equipo de estudio, concibe el plan de difusión, mantiene actualizado sus conocimientos y genera hábitos adecuados para la producción intelectual. ¡Eso!, lo sabemos.
En la pose que asume, en el caso del desorden institucional existente, el doctor Leonel Fernández, dice como el guaguanco aquel: -”Yo no sé nada, yo llegué ahora mismo; si algo pasó, yo no estaba aquí”-.
sábado, 20 de junio de 2009
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