Image and video hosting by TinyPic

lunes, 7 de septiembre de 2009

El que trabaja es el que cobra

Un político tiene el precio natural de su labor. Con el paso del tiempo, podrá demostrar la solidez de su compromiso, pudiendo correr el riesgo de no vivir suficiente tiempo para obtener el éxito de su trabajo.

El fin de todo el que trabaja, logra el resultado perseguido y que una vez logrado, debe de llenarse de satisfacción por tener en tus manos el fruto de su esfuerzo; sin embargo, cuando andas de vago o recostado de otro, el beneficio será que no puede lograr lo que el otro tiene, pero que lo desea.

En la actividad de la política, los beneficios frutos del trabajo en las bases, no se endosan a favor de alguien, como si se tratara de un cheque o pagaré; ¡¡¡ Tiene que fajarte a ganártelo trabajando en el lugar correcto!!!

Los aspirantes a cargos no deben de vivir de la benevolencia del líder para asegurarse una posición porque “no es de la benevolencia que vive el cocinero, el cervecero o el panadero de quien esperamos nuestros alimentos, sino de su consideración por su propio interés”.

En tiempo en que el doctor José Francisco Peña Gómez lideraba el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), existía un grupo de dirigentes que por la benevolencia del líder, levitaban dentro de las altas instancia de esa organización. Eran dirigentes que obtenían posiciones producto del señalamiento de dedos.

El PRD después de la muerte de Peña, continuó colocando de dedos a personajes en la dirección central de esa organización sin haber dado un golpe en las bases. Un ejemplo de esto lo fue, un dirigente que llegó a la presidencia a través de negociaciones de aposentos y que se vendía como un gran líder, pero nunca en su condición de presidente, visitó a los dirigentes medios de las bases, pero tampoco los comités en el exterior. Sólo en su mente existía ese gran liderazgo, el tiempo se encargo de demostrar lo contrario.

En una ocasión, escuche a Peña Gómez decirle a varios dirigentes reunidos en Cambita, San Cristóbal-“ustedes aspiran a ser candidatos a puestos electivos; sin embargo, no estudian, ni hacen trabajos en las bases”; a seguida le increpó ¿Cómo pretenden llegar a las posiciones que aspiran con el apoyo de los dirigentes de bases?

Cuando un líder político persigue su propio interés y obtiene con estabilidad ciertos éxitos, puede proyectar sus sentimientos altruistas hacia los demás, ya que el ejercicio de la política sin prudencia, no es concebible. ¿Qué puede ofrecer un dirigente a las militancias de su organización que por sus imprudencias o vagancias no atendió su negocio político?

Si es cierto que la simpatía constituye un rasgo de la naturaleza del político para fundamentar sus virtudes como ente social, no es meno cierto que la vagancia política produce malquerencia hacia su persona.

Estos vagos de la política no se merecen que invoquemos su humanidad, sino su egoísmo y nunca le hablemos de nuestras necesidades sino de su interés, porque el político ambiguo, le gusta que escuchar solamente lo que le interesa; y es que el trabajo combinado con la prudencia, constituye la principal virtud del político que se respeta, porque su objetivo es la defensa de sus principio con diligencias y laboriosidad.

El líder o dirigente máximo de una organización política debe practicar en su accionar, la prudencia como virtud principal, ya que esta es la principal de las demás virtudes. Por eso, no puede endorsarle parte su liderazgo a otro dirigente como si se tratara de un cheque, por que si a la hora de presentarlo al cobro, le pueden rehusar el pago, y este como emisor, queda desacreditado; que es lo mismo, que el beneficiario no logró su objetivo. ¡¡¡Cobrar el trabajo de otro!!!- La política de los chicharrones no enseña que el “que no trabaja no come”.

1 comentario:

  1. Ciertamente el que trabaja es quien cobra, en asunto politico quien hace lo que promete y aun lo que no promete siempre ocupara un lugar y mas aun si se preocupa por su projimo, su projimo es la familia, el vendedor ambulante, el comerciante, el recogedor de basura etc., y no trata de brillar solo para su beneficio, con una pantalla de misericordioso por delante pero realmente es solo una careta, deseo los lectores
    puedan interpretar este articulo. no soy politica precisamente para no ser falsa.
    raquel demorizi

    ResponderEliminar